ENSAYO SOBRE EL ARTISTA – CURADOR

Se presenta como una alternativa curatorial, donde creadores se reencuentran a partir de vínculos con pares contemporáneos, obras y diferentes lenguajes. Se reencuentran con la institución y con el visitante. 

Estos meses de aislamiento, lejos de generar o incluso ponderar el trabajo individual, expusieron la importancia de crear lazos colaborativos y reafirmar la necesidad de unir eslabones sentimentales para continuar y proyectar. En términos hegelianos comprender lo valioso de “ser con”. 

Los nuevos métodos colaborativos, que ya empezaron a ser urgentes en otras investigaciones y disciplinas, permiten difuminar la concepción romántica de “únicos roles”, es por ello que, en esta muestra, el curador concede a cada Artista la posibilidad de invitar un par-artístico-afectivo, convirtiéndolo, así mismo, en artista y curador de su propia sala. 

A partir de recuperar la simbología de las culturas ancestrales, las primeras formas en sus obras, las memorias familiares plasmadas en objetos, la mirada del afuera, la construcción de imágenes a partir de recortes de otras épocas y la recopilación de testimonios, estos Artistas tandilenses empatizan mediante vínculos y decisiones compositivas.

 De esta manera, la exposición funciona como una amalgama donde se genera un diálogo que conlleva la particularidad de los universos personales, mientras se completa en el otro.

                                                                    Lic. Ceres González

 Artistas en sala. Maria Abasolo, Mariana Hoffmann, Cecilia Pagliaro, Rodrigo A. Velázquez, Fermin Kolor, Christian Amezcua,  Gaston Zieher,  Ailen Guerra, Claudia C. Speranza, Mariano Schettino, Matias Petrini